Por este motivo la plaza se hace un lugar de paso obligatorio para las personalidades más relevantes tales como embajadores y cardenales. Esto aportó un cierto bienestar a la zona: la plaza se convierte en la sede de un floreciente mercado de caballos que se llevaban dos veces a la semana (lunes y sábados), y en torno a ella surgieron muchos locales, albergues y talleres de artesanos. La plaza se convirtió en centro de varias actividades, ya sean comerciales o culturales como la "Taverna della Vacca" que perteneció a Vannozza Cattanei (amante de Alejandro VI).
Hasta el siglo XV la plaza no existía y en su lugar había un prado florido, del cual deriva su nombre. En el 1456 el papa Calixto III hace pavimentar la zona como parte de un proyecto más amplio de remodelación de todo el rione de Parione. Esta remodelación preveía que muchos edificios importantes fueran construidos en la zona; en particular, el edificio de la familia Orsini estaba en el mismo Campo de' Fiori.
El Campo dei Fiori se convirtió en un lugar muy próspero, repleto de talleres
artesanos y albergues, y se montaban mercados de caballos dos veces por semana.
La plaza también era el lugar en el que se celebraban las ejecuciones públicas,
algo que se encarga de recordar la impresionante estatua de Giordano Bruno
situada en el centro de la plaza. Este filósofo fue quemado en la plaza en el
año 1600 acusado de herejía, y en 1889 se levantó el monumento en su honor.
En la actualidad el Campo dei Fiori es uno de los lugares más populares de la
capital. Todas las mañanas de lunes a sábado, desde el año 1869, se monta un
mercadillo en el que se venden alimentos, flores y productos variados. Por la
noche se convierte en una zona muy agradable para cenar en alguna de sus
terrazas.
En Campo de' Fiori también tenían lugar las ejecuciones públicas. Aquí el 17 de febrero de 1600 el filósofo italiano Giordano Bruno fue quemado vivo por hereje y todas sus obras fueron puestas en el Índice de libros prohibidos por el Santo Oficio. En recuerdo de Bruno se construyó un monumento erigido en la misma plaza en el año 1889, obra del escultor italiano Ettore Ferrari, donde se lee: BRUNO - IL SECOLO DA LUI DIVINATO - QUI DOVE IL ROGO ARSE ("Bruno -el siglo que predijiste- aquí donde ardió la hoguera").